USAID, EVO MORALES Y LAS GUERRAS DE LOS ALIADOS DE FERNANDO LUGO

Facebook
WhatsApp
Telegram
Diario Siglo XXI de España

Una advertencia sobre la intromisión de EEUU en el Paraguay

Creada oficialmente en 1961 como iniciativa del presidente Kennedy y aprobada por el Congreso, USAID tenía originalmente como objetivo el desarrollo de la ayuda humanitaria en el mundo. Similar al National Endowment for Democracy, en cuya órbita giran los medios paraguayos aliados de Fernando Lugo, la USAID desvía una gran parte de sus fondos para a apoyar políticamente a quienes promueven en el exterior intereses de Washington.

Ha resultado, en definitiva, ser una de las armas más poderosas de la CIA, que la utiliza para sus intervenciones encubiertas, dado que pertenece en realidad al Departamento de Estado y opera desde la embajada norteamericana en los países donde se encuentra presente.

En Bolivia, su presencia ha sido denunciada en más de una ocasión como perturbadora y desestabilizadora por el gobierno de Evo Morales, en tanto en Paraguay no deja de avanzar en materia de infiltración de instituciones.

En ese contexto y con la coartada de fortalecer la colaboración institucional entre los gobiernos de Estados Unidos y Paraguay, visitó el Paraguay en estos días el señor Mark Lopes, subadministrador adjunto para América Latina y el Caribe de la Agencia de los EE.UU. para el Desarrollo Internacional (USAID).

Lopes, un graduado en música del Berklee College, es el encargado de la melodía que sonará en Paraguay, país donde el 80 por ciento del estado está infiltrado por la agencia norteamericana según reconoció un mismo alto funcionario del gobierno de Lugo, y donde por las migajas que dicha agencia arroja a los canes que aguardan ansiosos bajo la mesa son capaces de precipitar incluso una guerra paraguayo-boliviana.

Tal vez no sea casualidad que mister Lopes haya participado ya de conflictos bélicos en West Darfur, Sudan, no muy lejos de la convulsionada Libia de Gadafi, en una de las misiones “humanitarias “ de George W. Bush. La administración estadounidense en verdad nunca quiso aliviar el sufrimiento de las tribus de Darfur, sino utilizarlas como excusa para el bloqueo del país.

El imperialismo estadounidense se valió del sufrimiento de los pueblos de Darfur para conseguir un embargo comercial contra Sudán, para que sus principales rivales no puedan acceder a los pozos de petróleo sudaneses. La medida terminó dirigida principalmente contra China, Francia, India y Malasia, todos éstos con intereses petroleros en Sudán. Al mismo tiempo, fue utilizado como una forma de aumentar la presión sobre el gobierno sudanés y fortalecer la posición militar y estratégica de EEUU en esta parte del mundo. Al noreste de Sudán está el Mar ojo con sus vitales terminales petroleras en la costa occidental de Arabia Saudí.

Se ha dicho que la guerra es una masacre de gente que no se conoce para provecho de gente conocida pero que no participa de la masacre, y precisamente de eso se trata la guerra de la tinta desatada entre Bolivia y Paraguay.

UN GOBIERNO PROHIJADO POR JAMES CASON

Para no dejarse sorprender por la orientación que pueda tener el gobierno del cura Fernando Lugo, y sobre todo su relación con Estados Unidos, no debe dejarse pasar el detalle que estamos hablando de un gobierno prohijado por James Cason, embajador en Paraguay durante la campaña electoral que llevó al poder al cura. Se trata de un personaje que, según confesaron altas fuentes norteamericanas, había hecho su paso por La Habana con intenciones bien definidas.

A mediados del 2010 Roger Noriega, subsecretario de Estado para el Hemisferio Occidental durante la administración de Bush.

Reconoció que “James Cason, ex Jefe de la Sección de Intereses de los Estados Unidos en La Habana, fue con instrucciones precisas del Departamento de Estado de provocar al Gobierno de Cuba para buscar su expulsión. En respuesta EEUU. retiraría su representación en La Habana pidiéndole al gobierno de Cuba que hiciera lo mismo con su representación en Washington”…
En Paraguay, su actuación no fue menos injerencista, dado que apoyó decididamente y con una lluvia de dólares a la mayoría de los movimientos que apuntalaron la candidatura del cura Fernando Lugo para ganar las elecciones paraguayas el 20 de abril de 2008.

Las consecuencias resultantes, según un alto funcionario luguista confesó recientemente son que el gobierno de Lugo está “llevando al Paraguay a una confrontación con los países vecinos, que sería uno de los propósitos de EE.UU. Para más sospechas, Lugo no cambia a ninguno de sus ministros que son fichas de los norteamericanos”.

El caso del refugio al enemigo de Evo Morales, Mario Cossío, y los conflictos con Argentina a raíz de bloqueos del Paraná son buenos ejemplos.

El mismo autor (Idilio Méndez Grimaldi) que afirma que el mismo presidente Fernando Lugo “transó” con la CIA (agencia de espionaje de EE.UU.) y que los ministros Héctor Lacognata (Cancillería), Rafael Filizzola (Interior), Dionisio Borda (Hacienda), Efraín Alegre (MOPC) y hasta el propio Miguel López Perito (Presidencia) están “alineados” a la Embajada de EE.UU., al FMI y otros organismos de dominación imperial.

La USAID maneja, según las mismas fuentes, un 80 por ciento del estado paraguayo y que ello no constituye exageración puede advertirse leyendo una noticia de hoy día en el enlace:
http://www.judiciales.com.py/noti/1-hoy/421-corte-inicia-la-elaboracion-de-la-planificacion-estrategica-del-poder-judicial.html

Según la noticia, el mismo “presidente de la Corte Suprema de Justicia Luis María Benítez Riera, y los ministros darán apertura oficial a la elaboración de la Planificación Estratégica del Poder Judicial para el quinquenio 2011-2015, que contará con la asistencia técnica del Centro de Estudios Judiciales (CEJ) en el marco del programa de Fortalecimiento del Estado de Derecho (CEJ, CIRD, USAID). El acto será a las 14 horas el Salón Auditorio ubicado en el 1er piso, Torre Norte, del Palacio de Justicia”.

“El evento de apertura contará con la participación de Rose Rakas, directora de USAID Paraguay, y Mark López, director adjunto de USAID para América Latina y el Caribe, quien tendrá a su cargo palabras durante la presentación de la Planificación Estratégica del Poder Judicial”.
Aunque EEUU reclame más seguridad jurídica al Paraguay, lo cierto es que se reclama a sí mismo dado que hasta la justicia en este país la planifica USAID.

ALUMNOS APLICADOS DEL IMPERIO

De todas maneras, ser un alumno aplicado del imperio tiene sus ventajas, sobre todo en materia publicitaria.

Al igual que lo que sucedía en Argentina en tiempos de Menem, los medios adictos al imperio y organismos como el FMI no dejan de alabar el “crecimiento económico” y la estabilidad macroeconómica lograda por el cura y su séquito.

“Empresas norteamericanas están interesadas en invertir en el país luego del resultado económico registrado el año pasado, cuando alcanzó un crecimiento de 14,5%” según la embajadora de los Estados Unidos, Liliana Ayalde.

La diplomática, según la prensa, se reunió con el ministro de Hacienda, Dionisio Borda, para hacer un repaso del programa Umbral II, que se lleva a cabo en diferentes instituciones públicas con la intención de combatir la corrupción y la impunidad que las afectan.

La concesión de aeropuertos, dicen las crónicas, es uno de los temas que interesa a los empresarios norteamericanos, por lo que esperan que las decisiones a nivel del Parlamento se concreten para abrir eso a licitación. Ayalde, sin embargo, indicó que a la par del interés existentes, también está siempre en el aire la reputación de Paraguay en cuanto a la seguridad jurídica y la corrupción, por lo que son obstáculos y retos que debe enfrentar el país.

EL FANTASMA DE LA GUERRA CON BOLIVIA

Pero no todo es color de rosa, a pesar del romance con el imperio.

Un fantasma agita a la opinión pública paraguaya desde la prensa que responde al gobierno de Fernando Lugo, y se trata del armamentismo boliviano.

El mismo canciller Héctor Lacognata había reconocido no tiene otra alternativa que subirse al carro del armamentismo y prepararse para la guerra contra Evo Morales.

El mismo comandante de la Armada paraguaya, contraalmirante Claudelino Recalde, llegó a reclamar en un acto oficial el fortalecimiento de la marina para proteger las fronteras fluviales y recursos acuíferos del país. La Armada paraguaya dispone de 72 destacamentos navales a lo largo de los ríos, aunque todas con precario equipamiento y dotación de hombres, según analistas militares.

Además de los grandes ríos Paraná y Paraguay, y numerosos ríos interiores, el Paraguay también comparte con otros países limítrofes el Acuífero Guaraní, uno de los más grandes del mundo. “Fuertes intereses impostergables señalan la necesidad de fortalecer a la Armada paraguaya para que disponga de un poder naval capaz de respaldar y brindar seguridad a los mismos”, dijo el comandante de la marina paraugaya, refiriéndose a esos recursos hídricos.

En 1935, Paraguay derrotó militarmente a Bolivia en una guerra por la posesión del Chaco Boreal, desarrollada en el escenario de una disputa inter-petrolera entre la Shell y la Standard Oil,. La victoria paraguaya en los campos de batalla acabaría deshecha en la paz.

Un comité formado por los delegados Braden, Ruiz Moreno y Barreda Laos (de Estados Unidos, Argentina y Perú respectivamente), empezaron a elaborar un tratado secreto que, según ellos, proveería tanto a Paraguay como a Bolivia, mutua satisfacción. En realidad hoy sabemos que el tratado preservaba para Bolivia –pero sobre todo- para la empresa petrolera Standard Oil unos 38 mil kilómetros cuadrados de ubérrimo territorio petrolífero en poder de los paraguayos. La mesa de negociaciones estaría presidida por el agente de la empresa petrolera de los Rockefeller, Spruille Braden, cuyas actividades en países como Cuba, Argentina, Guatemala o Chile nunca estuvieron desvinculadas de la política interna y los golpes de estado.

FALSAS BANDERAS NACIONALISTAS

Mientras la prensa vinculada a los intereses transnacionales, como lo que respaldó la campaña de Fernando Lugo, agita falsas banderas nacionalistas, también promueve la colonización económica y cultural del Paraguay, Una de las cotidianas humillaciones que estos medios le infligen a Lugo es forzarle a proclamarse periódica y públicamente antichavista, y partidario de la “libertad de expresión”. Aunque ésta sólo sea efectiva para los empresarios de los medios como el propietario de ABC color, Aldo Zucolillo, obviamente, y el pequeño grupo de privilegiados propietarios de radios y medios que se forjó a la sombra de la dictadura neo-nazi de Stroessner.

La visión de ABC color sobre las dictaduras varió con respecto a Stroessner, pero se mantuvo invariable con respecto a Fidel Castro y Augusto Pinochet, dado que sigue vilipendiando sin pausa al líder de la revolución cubana las veces que tiene oportunidad, y alabando y defendiendo al dictador chileno.

La visión histórica nacional de Zucolillo, expresada a través de sus empleados en las páginas de su diario, es acorde a la de sus amigos y compañeros propietarios de medios reunidos en la SIP.
En materia económica, el director de ABC color es un gran admirador de Martínez de Hoz, a cuyos discípulos promovió como columnistas estrellas en su diario, así como idolatra a sus herederos neoliberales que acapararon los consejos económicos en tiempos de Carlos Menem. También es un devoto admirador de la cultura norteamericana, y eterno propagandista de las versiones propaladas por el exilio cubano en Miami.

Carlos Alberto Montaner, Plinio Apuleyo y Andrés Oppenheimer son sus principales referentes para exponer la realidad latinoamericana, y los enemigos del presidente George W. Bush en cualquier parte del mundo, inmediatamente son asimilados como enemigos de ABC color y presentados ante sus lectores como enemigos del Paraguay y de toda la humanidad, sin escatimar recursos propagandísticos.

La satanización de Fidel Castro y de Hugo Chávez y los ataques a la integración latinoamericana, así como la glorificación de la “guerra al terrorismo” de la ultraderecha de Washington son el eje alrededor del cual giran todas las noticias internacionales que difunde el diario de Zucolillo.

En materia nacional, todas las versiones que difunde y que obliga a repetir a los periodistas radiales a quienes apoya con auspicios, convergen en un enfoque neoliberal en materia económica, derechista en preferencias políticas y antinacional en perspectivas históricas y de proyección al futuro.

Curiosamente, este esquemático subproducto de la propaganda imperialista y el pensamiento retardatario, en apariencia dio un giro de 180 grados al promocionar a un supuesto teólogo de la liberación izquierdista.

Pero la impresión fue apenas un espejismo. Para prodigar apoyo a su gobierno, Zucolillo conminó al obispo Fernando Lugo a revisar sus discursos sobre Hugo Chávez, Bolivia, Ecuador, Cuba y las bases militares de Estados Unidos en Colombia. En materia económica, le obligó a desenterrar las recetas del Fondo Monetario Internacional.

Con respecto a la vecina Bolivia, sus campañas secesionistas han trascendido las fronteras, generando preocupación en la misma prensa boliviana. En caso de lograr desatar su anhelada guerra con Bolivia, no sería extraño que aproveche para volver a comerciar azúcar con el enemigo, como lo hicieran sus ancestros en la década de 1930.

FUENTE: Diario Siglo XXI de España

FOTO: Internet

Facebook
WhatsApp
Telegram

Te puede interesar