La petrolera Repsol financió la celebración del séptimo aniversario de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP) en España, el 16 de febrero, según informa el diario El País.
Los embajadores de Bolivia, Cuba, Nicaragua, Ecuador y Venezuela recibieron a casi 400 invitados, entre ellos a Antoni Brufau, presidente de Repsol, la compañía que está presente en todos los países anfitriones del evento, menos en Nicaragua.
El embajador de Venezuela, Bernardo Álvarez, explicó que Repsol se hizo cargo del montaje, el local y el bufet principal; mientras que las embajadas se hicieron cargo de platos típicos y licores de sus países.
En nombre de los cinco países, la embajadora de Bolivia en España, María del Carmen Almendras, pronunció un discurso en el que comunicó a los asistentes que el evento se podía realizar gracias al patrocinio de la petrolera española.
Pero mientras Repsol paga el festejo del ALBA, el presidente Hugo Chávez ayuda a la presidenta Cristina Fernández para reducir la posición de Repsol YPF en el mercado argentino, señala la nota de El País.
En 2007, Chávez amenazó con echar de su país a la firma, que trabaja en un yacimiento de gas que se explotará con una inversión de 1.500 millones de euros; se calcula extraer hasta 1.200 pies cúbicos diarios hasta 2036.
En Bolivia, la petrolera invertirá este año 475 millones de euros. Tras la renegociación de los contratos petroleros en 2009, Repsol ya tenía comprometidos más de 900 millones de dólares.
