Santiago de Chile (PL)
Chile vive hoy una jornada de crisis política, marcada por un endurecimiento de la postura del gobierno frente al acentuado descontento social.
Mientras los estudiantes responsabilizan a las autoridades de la violencia y el caos generado en torno al llamado de una manifestación pacífica a favor de la educación pública y gratuita por avenida de la Alameda, La Moneda anuncia que aplicarán “todo el rigor de la ley” contra “marchas ilegales”.
De hecho, el ministro de la presidencia, Andrés Chadwick, responsabilizó a los dirigentes estudiantiles de los desórdenes provocados hoy en el contexto de una frustrada movilización que terminó con la ultradifundida imagen de tres buses quemados.
“Los dirigentes estudiantiles saben perfectamente los efectos que se van a producir, saben que están abriendo las puertas al vandalismo y a la delincuencia, saben que se van a producir daños a la gente que trabaja”, dijo Chadwick.
“Ellos no pueden eximirse de la responsabilidad que tienen en estas convocatorias ilegales. ¿Hasta cuándo vamos a tener que tolerar, soportar o permitir que un grupo de dirigentes se sienta por sobre la ley?, expresó el portavoz de la presidencia de Chile.
Paralelamente, la Asamblea Coordinadora de Estudiantes Secundarios (ACES) no descartó que los referidos buses incendiados este día respondan a un montaje orientado a justificar la criminalización de la protesta social.
Eloísa González, vocera de la ACES, denunció una desmedida represión policial con saldo incluso de varios jóvenes heridos este miércoles en el centro de Santiago y consideró “bastante sospechoso” que con tam fuerte despliegue policial no se haya podido impedir la actuación aislada de los que protagonizaron la quema de vehículos.
Ciertamente “no tenemos claridad de quiénes son los encapuchados y cómo han transcurrido estos hechos de violencia”, comentó.
Paralelamente Gabriel Boric, vocero de los estudiantes universitarios, denunció que los Carabineros “se tiraron con todo” hacia el interior de la sede de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (FECH).
“Tenemos gente desmayada, gente vomitando, está entrando el zorrillo (vehículo militar lanza gases)” a la FECH.
Según Boric, “los que se pusieron al margen de la ley son los empresarios que siguen lucrando con la educación y el gobierno que ha preferido hacer oídos sordos cual avestruz esconder la cabeza y no enfrentar el problema de fondo”