Anastasia Gubin
Un estudio en regiones de Estados Unidos y Canadá donde se desarrollan las prácticas de fractura hidráulica o “fracking” para obtención de petróleo y gas esquisto (shale gas), demostró la relación de esta práctica con la grave crisis del agua que vive la población, que en la práctica se transforma en una competencia por el uso del agua. Una situación que puede tener réplicas en otros lugares.
La fractura hidráulica demanda el uso de una gran cantidad de agua dulce para ser bombeada bajo Tierra. Desde el punto de vista financiero el tema es observado en Wall Street. Para los ambientalistas significa un gran riesgo.
Un solo pozo requiere entre 2 y 10 millones de galones de agua. Además esta agua es mezclada con arena y productos químicos. El proceso de fracturación rompe las rocas bajo tierra y de esa manera libera el petróleo o gas natural, informo CERES el 15 de febrero.
“Ceres encuestó a casi 39.300 pozos de fracking en todo el país (EE.UU.) y encontró que el 55 por ciento se encuentran en zonas que sufren la sequía. Tomados en conjunto, todos los pozos estudiados durante un período de 17 meses consumieron 97 mil millones de galones de agua”, agregó.
El problema no es la relación de la cantidad de agua usada a nivel global de un estado, sino a nivel local, ya que hay otras prácticas que también consumen el agua, como en el caso de generar electricidad y en el riego.
Ante la preocupación por la posibilidad de que la fractura hidráulica podría estar contaminando los acuíferos, como sostienen ambientalistas, el estudio asegura que ésta se produce por debajo de los acuíferos, separados por una milla o más de la roca impenetrable. “Sin embargo, la tasa de agotamiento del agua subterránea ha aumentado notablemente en los últimos años, y el agua subterránea se está retirando más rápido de lo que se recarga por precipitación”, agregó.
“Esto ha tenido muchas consecuencias negativas, incluyendo el hundimiento del suelo, reduciendo los rendimientos del agua potable, acortando la primavera y disminuyendo los caudales. Como resultado, todas las formas de uso del agua se enfrentan el escrutinio, el fracking incluido”, destacó el estudio.
Para la organización Food & Water de Europa, en este tipo de operación gran parte del agua resulta “contaminada, irrecuperable, o ambas cosas”, y “conlleva el riesgo de contaminar las aguas superficiales y subterráneas (incluida el agua potable) con las sustancias químicas tóxicas utilizadas en los fluidos de fracturación”, destaca.
A estos riesgos la organización agrega, la contaminación ambiental, el riesgo sísmico, y la alteración del paisaje.
Reconociendo los riesgos, los investigadores de Ceres sostienen que: “A pesar de su potencial impacto en los suministros de agua, el fracking no va a desaparecer. Los debates continuarán sobre fracking”, y ofrecen como alternativa no usar el agua dulce sino agua salina y agua de mar. ¿Cuáles serían entonces las consecuencias? No están expuestas en el informe.
“El crecimiento de la producción de petróleo y gas ha sido un importante punto resaltante en la economía de EE.UU., pero tenemos que pensar en soluciones de energía que aumentan, más de lo que agoten a los recursos hídricos”, dijo el estudio.
En relación a las instalaciones energéticas de energía nuclear los científicos señalaron que también requieren grandes cantidades de agua, y pese a los riesgos manifestados por sus opositores, no las descartan.
“Las centrales nucleares con torres de refrigeración consumen el 70 por ciento del agua que se retiran de un lago o de un río. Pero otras plantas nucleares con sistemas de refrigeración sin re circulación regresan el 99 por ciento del agua que se extrae de nuevo a la masa de agua”, dice el informe.
La energía geotérmica y solar, utiliza grandes cantidades de agua cuando debe enfriar los equipos y limpiar los paneles colectores, y en Iowa, la producción de etanol a base de maíz, creó una competencia por el uso del agua con conflictos entre los municipios, los agricultores y las empresas de energía, además de los pobladores.
Argentina México y Chile
Argentina y México se encuentran en el tercer y cuarto puesto, tras China y Estados Unidos en mayor capacidad de extraer gas esquisto en el mundo, por delante de Sudáfrica, Australia, Canadá, Libia, Argelia y Brasil. En menor porcentaje se nombran a Polonia, Francia, Noruega Chile e India, dice un reporte a de la Administración de Energía Nuclear (EIA).
Según la EIA, el consumo de gas natural de Chile, en 2009 fue de 0,10 TcF (trillones cúbicos de pies), siendo que las estimaciones dicen que tiene un potencial de 64 TCF recuperable.
Fracturas hidráulicas en Terra del Fuego
La Empresa Nacional del Petróleo (ENAP) de Chile confirmó la intervención a pozos de exploración con fractura hidráulica para producir gas no convencional desde la Zona Glauconítica del Bloque Arenal, ubicada en la Isla de Tierra del Fuego.
“Positivos resultados arrojó la fractura hidráulica en el pozo para gas Dorado Sur 12, que Enap Magallanes lleva a cabo en el Bloque Dorado-Riquelme, a 133 kilómetros al noreste de Punta Arenas”, informa la ENAP en su portal de febrero de 2014.
“Se abre una nueva ventana al futuro energético de nuestra empresa y al proceso del hidrocarburo en nuestra región”, señaló el sindicato de trabajadores, según OLCA en julio 2013,
“Actualmente, la empresa está realizando fracturas hidráulicas en pozos para gas en la Zona Glauconítica y Springhill, con una cartera total de 29 pozos a fracturar este año (19 de ellos para gas), cuatro en Continente y el resto en Tierra del Fuego (Bloque Arenal)”, informa la ENAP en su portal de febrero 2014.
En Dorado Sur 12, la fractura la ejecutó la empresa Weatherford, con la coordinación de la Unidad de Geología de Desarrollo, dependiente de la Dirección de Desarrollo de Yacimientos y Nuevas Tecnologías de Enap Magallanes.
“Existe toda una logística detrás de la fractura. Si consideramos como faena el trabajo de terreno, ENAP se encarga de coordinar la carga de los tanques de agua y su filtrado, el transporte de la arena al pozo y velar por la seguridad de las operaciones y del medio ambiente, entre otros aspectos”, destacó Guillermo Otzen, jefe de la Unidad de Geología de Desarrollo de ENAP Magallanes.
La fiebre del fracking
Si se considera el punto de vista financiero, el Instituto Post Carbon Institute definió a la práctica de fracturación como “la burbuja especulativa del gas de esquisto” y la comparó con la burbuja inmobiliaria del año 2008, de la mano de Wall Street, tuvo la capacidad de hundir la economía global, según cita la Voz de Chile en 2013.
Un “número desorbitado de perforaciones, contratos de arrendamiento especulativos y prácticas engañosas a cargo de las empresas que explotan este tipo de energía”, indica el informe.
El ritmo de perforación para nuevos pozos aumenta desesperadamente en el intento de compensar lo que ya no está, con lo que vendrá, agrega,
Lista top ten de empresas en zonas de crisis de agua de EEUU
Anadarko Petroleum, ocupa la mayor exposición de pozos en zonas de alto estrés hídrico, incluyendo Texas y Colorado; le siguen Apache, Encana y Pioneer, informa Ceres en su reporte de febrero.
Chesapeake Energy a su vez tiene la mayoría de pozos en zonas de estrés medio.
La empresa Eagle Ford en el sur de Texas es la que tiene el mayor número de pozos de fracturación para la obtención de gas esquisto. Junto con demandar el 90 por ciento de las aguas subterráneas, la zona se encuentra con agotamientos de estas aguas.
Anadarko, EOG Resources , SM Energy, Marathon Oil , Chesapeake y Murphy Oil, son otras compañías presentes.
La empresa Permian Basin tiene en Nuevo México y Texas la mayoría de los pozos en lugares de agotamiento del agua.
Según Ceres, en estas regiones se prevé que para el año 2020 se dupliquen los pozos, y las empresas Apache, Pioneer, Devon, Occidental Petroleum, Cimarex, Concho Resources, Energen y Laredo Petróleo, son las que se encuentran en la lista.
Para completar la situación en Estados Unidos, Denver Julesburg se encuentra en la Cuenca de Colorado, Marcellus en Pensilvania y Virginia; y Occidental Petroleum, Aera y XTO Energy son los operadores con el uso de agua más grande en la región.
Recomendaciones para operadores energéticos
El estudio de Ceres propuso a las empresas informar a los inversores, accionistas y reguladores sobre los volúmenes totales de agua y las fuentes utilizadas en cada extracción de gas esquisto, y las opciones de abastecimiento futuros y planes para reducir el consumo.
Además de dar el detalle de su uso presente y futuro de las fuentes de agua dulce y no dulce, el volumen de agua que vuelve a la superficie después fractura, los ingresos actuales y el crecimiento futuro en las regiones con escasez de agua.
Se recomendó minimizar el uso del agua, e involucrar a las comunidades locales sobre las necesidades y desafíos que se tienen con las operaciones que usan el agua y sobre los sistemas de reguladores locales y regionales que deberían operar una vez comenzada la extracción, para velar sobre posibles problemas del agua.
Incorporar la consideración de los riesgos del agua en todas las unidades de negocio y las actividades de planificación de negocio, desde la sala de juntas para el sitio de perforación.
Ante los riesgos que significaría la práctica de fracción hidráulica Food & Water Europe publicó una