Carlos Yárnoz/El País
Francia ha tardado menos de una hora en rechazar de plano la petición de asilo planteada por Julian Assange, fundador de Wikileaks, acogido en la embajada de Ecuador en Londres desde 2012. El presidente francés, François Hollande, considera que la situación de Assange no presenta “un peligro inmediato” y que, además, existe una orden europea de arresto contra él, cuya extradición ha pedido Suecia por un caso de presuntos abusos sexuales.
Assange ha planteado este viernes la petición a través de una carta enviada en paralelo a Hollande y al diario Le Monde. Este diario la ha publicado poco después de las 11.00 horas y, antes del mediodía, el palacio del Elíseo ha difundido su rechazo pese a que en el correspondiente comunicado señala que la decisión de no acoger a Assange se ha tomado tras “un examen profundo” de su “petición”.
Wikileaks ha precisado a través de su cuenta en Twitter que Assange no ha pedido “expresamente” asilo en Francia. Su abogado Baltasar Garzón recalca, en un comunicado, que “no ha presentado solicitud alguna de asilo a la República de Francia” y cuestiona el “análisis exhaustivo que supuestamente hizo el Elíseo”. Aunque no ha tramitado la petición formal, la demanda está implícita en su carta.
En la carta de Assange, enviada a Hollande y “al pueblo francés”, el fundador de Wikileaks asegura que se encuentra “amenazado de muerte” desde que su organización difundió en 2010 el vídeo titulado Collateral murders en el que se observaban los disparos mortales desde un helicóptero estadounidense en Irak. Entre los fallecidos, ninguno de ellos armado, hubo dos periodistas.
El periodista australiano, que precisamente este viernes cumple 44 años, comenta que desde hace tres años vive en un espacio de 5,5 metros cuadrados en la embajada de Ecuador.
Para Assange, la Constitución francesa “obliga a Francia a acoger a los combatientes por la libertad amenazados de muerte”. Comenta, además, que varias personalidades francesas, entre las que menciona a la ministra de Justicia, Christiane Taubira, han sugerido en el pasado que París podría darle acogida. “Acogiéndome, Francia demostraría un gesto humanitario” y enviaría una señal de ánimo “a los periodistas y filtradores que arriesgan su vida a diario para permitir que los ciudadanos conozcan datos sobre la verdad”.
“Solo Francia está en condiciones de ofrecerme la necesaria protección contra las persecuciones políticas de que soy objeto”, agrega Assange, quien recuerda que su hijo pequeño tiene nacionalidad francesa.
La demanda del fundador de Wikileaks se produce solo una semana después de que su organización difundiera documentos clasificados de los servicios secretos de Estados Unidos según los cuales Washington ha espiado a los tres últimos presidentes de Francia.